Por el Comité Editorial Blog IVI Dono
El zinc es una sustancia clave en cuanto a la composición de las células reproductoras masculinas conocidas como espermatozoides. Este micronutriente esencial puede obtenerse de diversos alimentos y por ello la dieta es un aspecto muy a tener en cuenta para tener esperma de calidad. Sus funciones principales están ligadas a la transcripción del ADN, así como en la síntesis de proteínas, aunque participa en otros aspectos vinculados a la fertilidad que comentaremos en los puntos siguientes.
Tabla de contenidos
El zinc y la fertilidad masculina
El zinc contribuye a aumentar la concentración de glutatión, un antioxidante primario de actividad intracelular que previene el deterioro de las células, así como regula el envejecimiento del organismo. Participa en la transcripción del ADN y la síntesis de proteínas.
Algunos estudios han observado que aquellos hombres en los que la concentración de zinc en el plasma seminal es inferior a la media presentan una cantidad pobre de esperma, además de que los espermatozoides tienen problemas a la hora de desplazarse por malformaciones en los flagelos. Este es un aspecto a tener en cuenta, ya que en el momento de la fecundación, las células reproductoras masculinas deben de avanzar hasta el óvulo para poder fecundarlo y si presentan deficiencias en la movilidad, hay mucha menos probabilidad de llegar a fecundarlo y formar el embrión, y por lo tanto lograr tener hijos mediante concepción natural.
5 alimentos que contienen zinc
Hígado
El hígado es un alimento muy nutritivo, bajo en grasa y que contiene unos 7 mg de zinc por cada 100 g.
Pese a tener un sabor un tanto fuerte, existen múltiples recetas para sacarle su mejor versión y poder aprovechar todos sus nutrientes de una manera sana y sencilla.
Almejas
El marisco, por lo general, es una gran fuente de zinc. Entre los moluscos (mejillones, pulpo, tellinas…) destacan las almejas, que pueden llegar a contener hasta 7 mg de esta sustancia por cada 100 g.
Las almejas también son una fuente de calcio y yodo entre otros minerales, por lo que son una gran fuente nutritiva y cocinadas de la manera correcta son un plato muy rico.
Avellanas y almendras
No son los alimentos que más cantidad de zinc tienen, sin embargo, son una alternativa a las carnes y/o los moluscos. Son unos productos económicos, que no requieren ser cocinados y que se pueden consumir a cualquier hora del día.
Algunos frutos secos como los anacardos, son una gran fuente calórica y por ello su consumo se debe de controlar en el caso de que no tenga una vida muy movida y no hagas un excesivo gasto energético, porque si no, podrían llegar a engordar.
Queso
Los lácteos son otra fuente de zinc y de calcio. Su aporte nutricional es de 4 g por cada 100 g de queso aproximadamente. Un poco de queso fresco al día en cualquier comida ayuda a mantener los niveles correctos de zinc en el organismo.
Como hemos mencionado en el apartado de los frutos secos, el queso es muy calórico y su consumo debe ser moderado. Por ello llevar una vida equilibrada es fundamental.
Copos de avena
Los copos de avena es un alimento que no puede faltar en tu dieta gracias a sus beneficios es un complemento perfecto en cualquier comida, ya sea en el desayuno o en el postre acompañado de yogur. Ayuda a regular los niveles de azúcar en sangre y aporta al organismo 3,5 mg de zinc por cada 100 g de alimento.
Con los copos de avena puedes preparar batidos saludables y ricos en proteínas utilizando varios alimentos como el plátano, leche, mantequilla de cacahuete, miel y clara de huevo.